Las dislalias o alteraciones en la modulación de los sonidos que consisten en no diferenciarlos en forma suficiente puede ser trabajadas desde la postura corporal. Una R no es una S ni una I y entonces el oído humano las percibe como diferentes asociándolas para darle un sentido a lo que escucha. Esa es la diferenciación necesaria para hablar y escribir.
Todos sabemos la importancia de los omóplatos para la liberación de los movimientos de los brazos y la postura erecta.
Cuando los omóplatos se mueven con facilidad este movimiento se desplaza por la estructura osea de los brazos y somos capaces de hacer un dibujo ya que los dedos toman el lápiz como si fuera una herramienta.
Los músculos omohioideos, tan importantes en la posición erecta y el bipedalismo, también ayudan a mover libremente el hueso hioides que a su vez moviliza los músculos de la lengua y las dislalias se modifican. Los sonidos aparecen mas diferenciados, nasales por un lado y bucales por otro.
En este momento de uso del pensamiento digital en detrimento del pensamiento analógico, porque es mas rápido y acorde al desarrollo tecnológico, la modulación es menor para alcanzar la velocidad necesaria para expresar la gran cantidad de ideas que aparecen en forma simultánea.
Creo que las dislalias irán en aumento por una necesidad cultural de ahorro de tiempo. Mas movimiento muscular, como la articulación de los sonidos, es perder mas tiempo.
Una forma de ayudar en este estadio evolutivo del lenguaje es ayudar a percibir los omóplatos y su función en el dibujo. Es notable como desciende el hueso hioides y se aclara la articulación.El cuello se hace mas largo y la succión del labio inferior en menor.
